domingo, 26 de enero de 2014

La música-astronomía-matemáticas

Fuente: http://www.educacion.gob.es/exterior/ad/es/publicaciones/Aula_Abierta2_Musica.pdf

Fuente: http://www.revistaciencias.unam.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=714:la-musica-de-las-esferas-taditio-y-canon-astronomico-musical-de-kepler&catid=102








Melodías en las que cada planeta se le asocia una nota. En el caso de la prsentada por R. Fludd se agregaron notas para los elementos sublunares y las jerarquías angelicales. Para los planetas es la distancia de la Tierra la que determina las notas.







Escalas planetarias en las que las notas dependen de la velocidad del planeta. En Harmonies of Heaven and Earth, Joscelyn Godwin, Inner Trad. Int, 1995.





Robert Fludd

Brahe- Keppler




Iohannis Kepleri























viernes, 24 de enero de 2014

Enric Corbera




















Christian Flèche, padre de la teoría de la descodificación biológica.


Christian Flèche, psicoterapeuta, padre de la teoría de la descodificación biológica

Victor-M Amela, Ima Sanchís, Lluís Amiguet

"Cada órgano dañado responde a un sentimiento"

30/05/2011 - 00:00
"Cada órgano dañado responde a un sentimiento"
Emociones
Las enfermedades son una tentativa de autocuración, una reacción biológica de supervivencia frente a un acontecimiento emocionalmente incontrolable, de manera que cualquier órgano dañado corresponde a un sentimiento preciso y tiene una relación directa con las emociones y los pensamientos. Junto al doctor Philippe Levy, Flèche creó nuevos protocolos para organizar un método de diagnóstico original emocional y una nueva forma de terapia breve que busca en las emociones el origen y la solución a las enfermedades. Tiene publicados 17 libros sobre la descodificación biológica, cuatro de ellos traducidos al español. El cuerpo como herramienta de curación (Obelisco) ha vendido tres ediciones
El cuerpo es nuestra herramienta de curación?
 Yo era enfermero en un hospital de Normandía y observe que pacientes con la misma enfermedad, tratamiento y doctor evolucionaban de manera muy di#7;ferente.

Bueno, cada uno es cada cual...
 Exacto, mi hipótesis es que las enfermedades son una metáfora de las necesidades físicas y emocionales de nuestro cuerpo. Cuando no hay una solución exterior a esa necesidad, hay una solución interior.

¿Eso es para usted la enfermedad?
 Sí, una solución de adaptación. Cada órgano del cuerpo quiere satisfacer su propia función, es decir, atrapar oxígeno, alimentos... Si el cuerpo quiere comer, pero en el exterior hay guerra y no lo consigue en un plazo razonable, se produce un shock.

¿Nace el conflicto?
 Sí, el inconsciente inventa una vía suplementaria de supervivencia: un síntoma, que es una solución o una tentativa de solución inconsciente e involuntaria a ese shock vivido. En ese caso, el miedo a morir de inanición atacaría el hígado.

Póngame otro ejemplo.
 Una persona que siempre tiene prisa puede desarrollar un nódulo en el tiroides, que envía más tiroxina y aumenta el metabolismo del cuerpo, eso la hará más rápida.

Pero tener prisa es psicológico.
 Todo lo que captamos a través de los cinco sentidos, de los captadores neurovegetativos que vienen del interior del cuerpo, lo que pensamos o imaginamos, se traduce en realidad biológica.

¿Y provoca un síntoma?
 Si no hay una solución concreta y consciente, sí. De manera que si escuchamos algo muy desagradable que nos afecta podemos tener acidez de estómago. Y hay algo muy importante que tener en cuenta.

Dígame.
 El cerebro no distingue entre lo real o lo imaginario. Un trozo de limón en la boca o la idea de un trozo de limón en la boca provocan la misma salivación. En función del sentimiento particular, el shock afecta a una zona precisa del cerebro, visible por el escáner, a un órgano y a una realidad energética.

¿Realidad energética?
 Somos una unidad compuesta de cuatro realidades inseparables: orgánica, cerebral, psíquica y energética. No hay ni una sola célula del cuerpo que escape al control del cerebro, y este no escapa al control del pensamiento, consciente o inconsciente; de manera que ni una célula del cuerpo escapa al psiquismo. Un shock siempre va acompañado de un sentimiento personal que repercute en los cuatro niveles biológicos.

¿Y es irreversible?
 Cuando encontramos la solución esos cuatro niveles sanan simultáneamente. Una paciente tenía dolor en el hombro. "¿Desde cuándo?", le pregunté. "La primera vez estabas sola con mis hijos" "Si estas con tus hijos, no estás sola, ¿quién falta?" "Mi marido que nunca está, yo necesito estar arropada". Cuando lo reconoció, el dolor desapareció.


A lo largo de un día no satisfacemos todas nuestras necesidades fundamentales.
Cuando no las satisfacemos, nace una emoción. Si esa emoción se libera en el exterior bajo una forma artística, a través de la palabra, el baile o los sueños... todo va bien. Cuando el acontecimiento no está expresado, queda impreso y el cuerpo será el último teatro de ese evento.

¿Todo conflicto provoca enfermedad?
 No, es necesario que sea dramático, imprevisto, vivido en soledad y sin solución. Cuando se dan estos cuatro criterios, el trauma se manifestará a través de la biología.

¿Distintas emociones corresponden a distintos órganos del cuerpo?
 Sí, todo lo que tiene que ver con la epidermis responde a conflictos de separación; el esqueleto, a una desvalorización; la vejiga corresponde a conflictos de territorio. Para las mujeres diestras, problemas en el seno y hombro izquierdos corresponden a problemas con los hijos y viceversa para las zurdas; los desajustes en el seno y hombro derechos corresponden para las diestras a problemas con la pareja y viceversa.

¿Estómago e intestino?
 No tener lo que se quiere y no poder digerir lo que se tiene corresponde al duodeno y estómago. El colon corresponde a un conflicto asqueroso, podrido. En el recto están los problemas de identidad: "No me respetan y me dejan de lado". Los riñones es la pérdida de puntos de referencia. Los huesos: grave conflicto de desvalorización...

¿Lo adecuado para estar sano?
 Revalorizar las emociones, ser consciente de las emociones y expresarlas, es decir: bailar más a menudo. La gente está mucho tiempo en lo emocional pero son emociones procuradas: fútbol, cine... Un malestar compartido disminuye a la mitad, continúa compartiéndolo y acabará desapareciendo. Una felicidad compartida se multiplica por dos.

La ira y la violencia se expresan a sus anchas.
 Un hombre tiene miedo, el miedo produce rabia, y la descarga enfadándose con su mujer. Cuando estamos en contacto con la emoción auténtica, se transforma; cuando lo estamos con la emoción de superficie, no hay cambio. Si el hombre se dice: "Lo que tengo es miedo", su miedo disminuye a la mitad. Hay que tomar conciencia de uno mismo.



Leer más: http://www.lavanguardia.com/lacontra/20110530/54163306905/cada-organo-danado-responde-a-un-sentimiento.html#ixzz2rMJjXkrF
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Harto - TheVicVlogs (Crítica social y política) con ARte HAY QUE VERLO Y DARLE MÁXIMA DIFUSIÓN






RAW FOOTAGE!!! Teahupoo 2013 HD!









Este año recupero mi tiempo de mar y de bodysurf... si Dios quiere

jueves, 23 de enero de 2014

Perro recibe a su dueño después de 6 meses sin verse

Escuchar el corazón, Mama coraje...

Fuente:
http://www.bebesymas.com/salud-infantil/salvo-la-vida-a-su-hija-por-no-hacer-caso-a-las-recomendaciones-de-dejarla-llorar?fb_action_ids=10202409279666137&fb_action_types=og.likes&fb_source=other_multiline&action_object_map=%5B10150716277230435%5D&action_type_map=%5B%22og.likes%22%5D&action_ref_map=%5B%5D
Las nuevas tendencias en lo que a educación y crianza se refiere han provocado que en la actualidad los profesionales de la salud se puedan dividir en dos grupos bien diferenciados: los que dicen que no tienes que dejar llorar a tu bebé y los que dicen que le dejes llorar, para que se dé cuenta de que no siempre puedes atenderle y así dejen de llorar.
Desde Bebés y más, y no porque nos parezca una tendencia, sino porque nos parece una cuestión de sentido común y de respeto, solemos hablar de un estilo de crianza en el que los padres se dediquen, simplemente, a cubrir las necesidades de sus hijos, siendo la necesidad de contacto, de recibir cariño y afecto una necesidad tan (o más) importante como el comer o el estar limpio y seco.
Esto mismo es lo que debió pensar Sarah, una madre que hace cosa de dos años escribió en un blog que, gracias a que nunca dejó llorar a su hija, ésta seguía viva.
Su segunda hija, fruto de una segunda cesárea, nació en febrero de 2007. Ya se sabe que cuando uno ya tiene un hijo, cuidar del segundo es un poco más complicado que cuando sólo tienes a uno, así que cuando a la semana de nacer un amigo le regaló una bandolera con anillas empezó a utilizarla agradecida, convirtiéndose pronto en una herramienta indispensable. Todas las tardes su hija lloraba, se arqueaba, no quería el pecho ni quería chupete. Ni siquiera quería brazos. Lo único que la calmaba era la bandolera.
La niña empezó a perder peso y la madre decidió que su hija iría siempre donde mejor estuviera, es decir, en la bandolera. Decidió por supuesto ir al médico, al que acudió en diversas ocasiones. La niña empezó a hacerle daño a la hora de mamar, momento en que ambas acababan gritando. Finalmente le cambió la leche materna por leche artificial y la situación cambió, quizás a peor, porque la niña empezó a tener reflujo. Los médicos le dijeron que tenía intolerancia a la lactosa. La niña ganaba poco peso y cada vez lloraba más.

Lo único que la calmaba era el contacto con mamá

Ello le llevó a pasar más de una noche en el sofá con ella, con la niña durmiendo en su regazo. Este fue el detonante para que la gente empezara a decirle que lo estaba haciendo mal, que estaba acostumbrando mal a la niña, a lo que ella respondía que era lo único que funcionaba. La gente empezó a recomendarle que la dejara llorar, que la dejara sola y que ya se dormiría, pero ella sentía que su responsabilidad como madre no se acababa a la hora de ir a dormir.
A los seis meses, viendo que la cosa seguía igual, pidió a su médico que ingresara a la niña. Como sabéis, un ingreso hospitalario no es plato de buen gusto nunca, pero cuando las cosas van mal, cuando una madre siente que algo no va bien, la sola esperanza de que le puedan ayudar hace de un ingreso una bendita solución. El pediatra estuvo de acuerdo y la ingresaron. Le hicieron análisis y radiografías, la alimentaron incluso a la fuerza para que la niña cogiera peso y evolucionara, pero la niña seguía llorando y gritando si no estaba constantemente con su madre.
Un día antes de irse del hospital, un pediatra le dijo que no estaba haciendo todo lo que debía con su hija. Le dijo que no ponía empeño en darle de comer ni era capaz de ponerla en otra habitación para dejarla llorar hasta que se durmiera. En ese momento decidió que ese pediatra no trataría más a su hija.
Así pasaron las semanas y los meses, con la niña colgada todo el día. Iba con ella a comprar, al parque, a la ducha… la gente le decía que si la llevaba siempre encima jamás aprendería a andar. Ella lo tenía en cuenta, pero aprendió a hacer caso omiso de los consejos, porque llevarla encima era lo único que hacía que no llorara.

Al año, por fin, un diagnóstico

Días antes de cumplir un año la niña empezó a tener fiebre alta y tos. Acudió a urgencias donde le hicieron una radiografía pulmonar. Buscando evidencias de una posible neumonía se dieron cuenta de que la niña tenía el corazón más grande de lo normal. Decidieron ingresarla y, finalmente, tuvo un diagnóstico para explicar un año de llantos casi continuos.
Estando en la planta, la niña empezó a llorar de nuevo, haciendo uno de sus episodios más “memorables”. La enfermera le dio el portabebés a la madre, la madre metió en él a la niña y allí, con ella, se calmó de nuevo.
Le explicaron que la niña tenía insuficiencia cardíaca, un defecto cardíaco poco frecuente para la edad, pero muy grave, que le había producido diversos infartos. La tasa de mortalidad de dicha enfermedad era de un 90% en el primer año. Los llantos se debían al malestar producido por los infartos y al dolor opresivo en el pecho que se derivaba de cada episodio.
El cardiólogo quiso dar valor a lo que la madre había hecho hasta ese momento y le dijo, casi a escondidas, en el pasillo y en voz baja, que era el modo en que la había cuidado lo que había salvado la vida de su hija.
Ahora la niña, Mila, tiene más de tres años. Después de dos intervenciones lleva una vida normal, como la de cualquier niña de tres años que corre, salta y juega y que, además cuida de su hermana pequeña que, lógicamente, también es porteada por su madre cuando las cosas se ponen “tensas”.

Los niños, cuando lloran, sufren

Es cierto que se trata de una enfermedad poco frecuente. Es cierto que cuando nuestros bebés sanoslloran, no lo hacen porque están sufriendo un infarto. Todo esto está claro, sin embargo, los bebés no tienen otra manera de solicitar compañía que a través del llanto y, cuando lloran, es porque de verdad necesitan algo.
¿Sabéis por qué el llanto de los bebés es tan molesto? Porque si fuera agradable nadie cogería a los bebés. El problema es que muchos padres se están desensibilizando hasta el punto que no sólo no les molesta que lloren, sino que además les dejan para que sean ellos mismos los que dejen de hacerlo.

Regenerar cartílago

Fuente:

http://mejorconsalud.com/como-regenerar-rapidamente-los-cartilagos-danados/

Cómo regenerar rápidamente los cartílagos dañados.

Cómo regenerar rápidamente los cartílagos dañados.
Una de las lesiones más comunes de todas las personas es el desgarro en los cartílagos, suele ser muy doloroso, pero últimamentese ha hablado de que la alimentación ayuda a que este se pueda regenerar nuevamente y de manera más rápida.

El cartílago es una estructura muy flexible que le da soporte a algunas estructuras sin peso como el pabellón auricular, la nariz,  y las articulaciones, pero existen áreas que son mucho más sensibles a dañarse como las articulaciones de las rodillas, que siempre son las más afectadas por aquellos que realizan actividades diarias y muy bruscas como los deportistas, pero también puede afectar a los ancianos por su deterioro corporal a cierta edad.

¿Cómo se regenera el cartílago?


El cartílago se regenera según el consumo de los alimentos. Otra de las afecciones más comunes que afectan a los cartílagos de tobillos, rodillas, muñecas, codos, y hombros es la artritis, una enfermedad bastante conocida en estos tiempos, que afecta a casi todas las personas a partir de los cuarenta años, por lo que se hace necesario tener una nutrición adecuada para que los tejidos cartilaginosos se pueden regenerar rápidamente.
Uno de los aminoácidos más importantes para la rápida regeneración del cartílago es la lisina, quien se encarga de absorber el calcio y producir colágeno para construir nuevamente el tejido dañado, además de mejorar el aspecto de la piel y la firmeza de los tendones.

Estudios realizados al respecto…

Cartilago
Un estudio realizado por la Universidad de Maryland (UMMC) determinó que una deficiencia de lisina puede retrasar el crecimiento del tejido dañado, además puede afectar le regeneración de las células de la piel, dañando la reconstrucción total del área comprometida con algún daño físico.
12 gramos de lisina por cada kilo de peso corporal es lo que se debe consumir para ayudar a que el cuerpo pueda reconstruir más rápido los cartílagos. Los alimentos que contiene un alto nivel de lisina son:
  • las legumbres
  • el bacalao
  • las carnes rojas
  • la cerveza
  • los huevos
  • la soja
  • el queso
  • los frutos secos
  • la levadura de cerveza
  • la gelatina.
La vitamina C es muy importante para elevar las defensas del organismo, pero no sólo hace eso, también es capaz de mantener la producción de colágeno, manteniendo la sangre oxigenada y llevándola por todas la arterias asegurándose de proveer las heridas de lo que necesitan para reconstruirse.
Una gran deficiencia de vitamina C puede reducir la cicatrización instantáneamente, además los seres humanos necesitan más de 75 gramos diarios de esta vitamina para renovar continuamente los problemas del cuerpo. Los alimentos que contienen la mayor cantidad de vitamina C son:
  • El kiwi
  • la naranja
  • las fresas
  • el limón
  • entre otros.